SENTIDO DE LA VIDA

La vida es mucho más simple de lo que parece; nuestra mente es la complicada.

Llevo mucho tiempo pensando e intentando concluir qué sentido tiene mi vida. Preguntas como si aprovecho bien el tiempo, si debo mejorar el inglés, si es bueno leer más que ver la televisión, si debo hacer más deporte, si trabajo demasiado, etc. Mi mente continuamente busca la senda para mejorar, piensa y piensa, la insatisfacción surge en ocasiones, la confusión, la duda. está claro y ahora lo comprendo, que nuestra mente busca salidas cuando la biología no sigue su correcto camino. Ahora lo he entendido.

El nacimiento de mi hija a restaurado todo mi sistema, todo mi metabolismo, ha calmado mi mente, ha ordenado mis prioridades. No hay duda, este es mi fin, no otro. No lo pienses más, no estás aquí para portarte bien e ir al cielo, no estás aquí para ser el mejor de la carrera, no estás aquí para dejar un legado intelectual, para ser el número uno del mundo al tiro con arco... ese no es el fin.

Estás aquí para sobrevivir y procrear. Y no sólo eso, tu organismo está preparado para dar tu vida por tu progenie, toda la bioquímica de tu organismo está finamente calibrada para que no le falte de nada a tus hijos. Así lo hacen los lobos, guardando sus madrigueras y protegiendo a sus crías y lobas; así lo hacen los búfalos cuando son atacados por depredadores dando su vida protegiendo a sus crías. Ellos al menos no son conscientes de lo que hacen, simplemente siguen su instinto. ¿Y qué nos diferencia a nosotros de esos animales? Pensamos, somos conscientes de nuestra existencia, nada más. El búfalo "malo" que no protegió a sus crías no fue al cielo desde luego, per tampoco dejó progenie con los que sus hábitos de mal padre no se heredaron.

No lo pienses, no mires al abismo, no le des más vueltas: todo, todo, todo, todo lo que haces en la vida es para sobrevivir y dar descendencia: NADA MÁS. Mi vida ya tiene un sentido, ya el inglés, el deporte, el estudio, son cosas tan banales que me sorprendo a mi mismo por la indiferencia que me suponen en este preciso momento.

Estamos solos, es duro. Seguimos la senda, el camino del resto de la vida en la tierra (¿y en el universo?). La vida es una, compuesta por la suma de todos sus manifestaciones, que lucha por continuar frente a la entropía del universo. ¿Hacia donde vamos? No lo sé, ¿que hay después de esta vida? Seguramente nada. Pero yo tengo clara una cosa, una única cosa, un dogma como una catedral... mi hija y mi familia son mi prioridad, en las que volcaré todo mi ser. Ese es mi destino.

He dicho.