Querido Brigada;
Ante todo quiero darte la bienvenida a este mundo y sobre todo a esta nuestra familia. No son tiempos fáciles pero créeme que la vida es un caramelo que merece la pena saborear; Es por momentos muy dulce y por momentos muy amargo. Algunas veces encontrarás toques picantes y otras tantas ácidos pero en conjunto verás que produce una explosión de sabores que merece la pena aprender a disfrutar.
La esencia de la vida querido amigo está ahí, en lo pequeño, lo cotidiano, en los detalles que la mayoría de los
mortales pasa por alto pero que si abres los ojos y prestas la suficiente atención no dejarán de maravillarte como lo hacen ahora cuando los descubres por primera vez.
El saberte pequeño ante lo que otros consideran insignificante y enorme donde otros se consideran impotentes es lo que te dará mi brigada, la clave para ser un Hombre.
Nunca dejes que nadie se convierta en tu juez ni te diga qué mereces y qué no. Se generoso, respetuoso, honrado y trabajador, intenta siempre hacer el bien. Eso te hará llevar siempre la cabeza bien alta. No pretendas nunca lo que no te corresponde pero defiende con determinación lo que sí... Y cuida siempre de los tuyos.
En definitiva, sigue siempre el ejemplo de tu papá y tu mamá, nosotros te acompañaremos.
Te quiere,
Tío bisagra.
Mi brigada es un niño afortunado, está rodeado de buenas personas cómo el tío bisagra y el subteniente peloncio.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hace poco leí una frase de G.K. Chesterton, que decía algo así como: "lo que está mal del mundo, es que no sabemos qué es lo que está bien".
ResponderEliminarPor si te hace falta, pequeño, te doy la indicación: sigue el ejemplo de tu padre y de tu madre. Y tu tío bisagra te dará otra clave: todo lo que hagas, que te sirva para sonreír en el último minuto...
Bienvenido al mundo, pequeño brigada.