Buena pregunta.
Por desgracia, depende. Depende de muchos factores pero sobre todo de si es israelí o palestino, porque en este caso, tampoco importaría mucho si fuese un niño o un adulto, chico o chica, anciano o bebé, pues su vida no valdría nada comparada con la de un israelí. Nada.
Y así asistimos estos días a la nueva escalada de violencia en Palestina.
Abro el periódico y leo titulares como que la flota de Israel bombardea Gaza desde el mar y me llevo las manos a la cabeza.
Rápidamente se me vienen a la mente las cervezas y los buenos momentos compartidos con Diego en el año del máster en cooperación que hicimos en Córdoba. Supongo que es una reacción de mi cerebro que hace prevalezca sobre la que mi imaginación puede aportarme del miedo y el pánico que debe estar sintiendo allí entre bombas.
La verdad es que no se quién ha puesto esta última vez el primer muerto sobre la mesa, pero lo cierto es que en ningún momento ha dejado de haberlos pues desde que tengo uso de razón siempre he visto muerte y más muerte en una espiral sin fin.
Especialmente nítida tengo en mi retina una imagen de hace unos diez años, durante la segunda intifada, en la que un padre intenta proteger con su cuerpo a su hijo de doce años de las balas de soldados israelíes...y me dan escalofríos.
Por eso Intento abstraerme para tratar de analizar con objetividad el origen de esta masacre; y me remonto a la declaración Balfour de 1917 en la que Reino Unido se declaraba favorable a la creación de un hogar nacional judío en el Mandato Británico de Palestina.
A este respecto, Lord Balfour, ministro británico de exteriores, dijo:
"En Palestina no pensamos consultar los deseos de los actuales habitantes del país. El sionismo, ya sea acertado o equivocado, bueno o malo, se basa en tradiciones muy antiguas, en necesidades actuales, en esperanzas futuras de una importancia mucho más profunda que los deseos o prejuicios de los 700.000 árabes que hoy habitan esa tierra ancestral”.
Así voy vislumbrando un poco el origen del problema; un problema de actitud, de prepotencia...
Y me queda un poco más claro al saber que en 1937, Winston Churchill, primer ministro británico, dijo de los palestinos en la Comisión Real sobre Palestina:
"Yo no estoy de acuerdo en que el perro de un pesebre tenga derecho a estar en el pesebre porque ha pasado allí mucho tiempo. No reconozco ese derecho. No creo, por ejemplo, que se haya cometido una gran falta con los indígenas Pieles Rojas de Estados Unidos o los negros de Australia. No creo que sea un daño para esas personas el hecho de que una raza más fuerte, superior, una raza más sabia en lo terrenal, por decirlo de algún modo, haya llegado y tomado su lugar”
De ahí viene el problema; con esa actitud entraron y con esa siguen. Con esa actitud de supremacía y desprecio con la connivencia de EEUU, Europa y la comunidad internacional.
Amigos, de nuevo manda el dinero. Puto dinero.
Israel sigue siendo el país que más resoluciones de las Naciones Unidas ha violado. Pero da igual, nada pasa. Ellos tienen el dinero. Se permiten hasta bombardear instalaciones de las propias NU en las que se almacena ayuda humanitaria con total impunidad. Ninguna sanción.
Pienso en que se han creado coaliciones internacionales, invadido países y derrocados regímenes por mucho menos... Bueno, me equivoco...por mucho menos no, por algo más importante que la vida de decenas de miles de personas: por petróleo... De nuevo el puto dinero.
Sigo leyendo las noticias, "7 personas más han muerto esta noche, dos de ellas niños". Dos más que unir a la lista de miles de críos masacrados en estos años por los que nadie pagará. Total en el planteamiento de Churchill Son "perros"...
Mientras siguen cayendo bombas, me asomo a Facebook a saber de Diego, su última anotación en el muro es de ayer: "Dónde está el flamante Nobel de La Paz, la Unión Europea?"
Amigo Diego, por desgracia ni está ni se la espera... Por favor, cuídate.
Suerte.
Bienvenido a "no valen crujios", lugar de esparcimiento físico, mental y espiritual, de una panda de indocumentados nacidos a finales de los 70. Nos asustaba un muñeco con pelos de cable que se llamaba la bruja avería, jugabamos en un campo de futbol con 5 esquinas, fuimos al médico con un dolor ficticio en el hombro para que nos vendaran estilo Oliver Altón, comiamos pollo con bollo en lo alto de un capo y con nuestras diferencias compartimos una de las cosas más importante en la vida, la amistad.
Nuestra máxima ,"un hombre que no tiene amigos desde pequeño, ni tiene amigos, ni es un hombre"
Nuestra máxima ,"un hombre que no tiene amigos desde pequeño, ni tiene amigos, ni es un hombre"
Otros 10 niños han sido asesinados hoy, y sigue sin pasar nada... De verdad, que paren el mundo que me bajo.
ResponderEliminarNo sé ni qué decir. Me bajo contigo, Bisagra.
ResponderEliminarBorreguismo ilustrado. La mentira. Cenar viendo muertos, como el que ve un partido de futbol. Apaga y vamonos.
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