Avenida Kansas city dirección guardería de gusanito.
En mi cabeza, mis problemas, mis asuntos, mis preocupaciones, mis inquietudes, mis, mis, mis...yo, yo, yo... Y delante de mis narices, a escasos 30 cm de mi coche, él, el taxista de los niños.
Traté de poner mi coche a su lado, ventana con ventana para darle las gracias, para decirle que su iniciativa merece mi respeto y que su solidaridad es un ejemplo, no pude...pero aquí lo expreso, hoy me ha dado usted una lección sin saberlo y le estoy agradecido por ello.
Mirar bien la foto, bob esponja, mariposas, el quitasol de princesas, fijaos en la luz verde del techo...los laterales, ventanas, todo para ellos...mi aplauso señor, hay esperanza...
Estos gestos son los que me hacen creer en el cambio. No es utopía, es la suma de buenas voluntades la que lo puede generar.
ResponderEliminarGracias señor taxista por hacerme ir a la cama con esperanza, es usted de esos fuegos que arden con. Tanta fuerza que quien se acerca se enciende...
Claro que no pudiste poner el coche al lado del suyo, el morro del tuyo termina a la altura de su maletero. ¿Y qué le habrías dicho? Te lo digo yo: Tieso, que eres un tieso, "enseguía" le voy a a poner una pegatina de Snoopy a mi A5. Esa es la suerte que tenéis los tiesos, que si quieres puedes forrar el coche a pegatinas, y más a un Skoda de mierda. Skoda, sí, los que tienen el mismo motor que los AUDI ¿no?: UN CARAJO DE GOMA PATIIIIIIIIIIIIIIIII!!!!!!!!!!!!
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